CADA MAÑANA
Cada mañana, están invitados a una cita consigo mismos, a un reencuentro con la sensación de existir aquí y ahora. Antes de abrir los ojos, contacten y sientan su pulsión de vida, de creación. A través de su “Presencia”, de la Voluntad y de la Atención, ustedes permiten que de lo más profundo la Energía de Vida se exprese, el “YO SOY”.
Ese momento de intimidad, con ustedes mismos, que puede ser de corta duración, es esencial, ya que los lleva a reconocerse.
Durante ese momento, estén atentos a sí mismos y recuperen la sensación de lo que han venido a hacer en esta encarnación, de aquello en lo cual han venido a participar, de lo que les permitirá amarse realmente. Reconozcan sus dones y sus cualidades, sus verdaderas herramientas de Luz. Afirmen sus Poderes de Creación. Durante ese momento, no se opongan mentalmente a lo que sienten.
No se trata de estar atentos a mensajes acerca de las actividades que han de desarrollar durante las próximas horas. Se trata más bien de sumergirse en la sensación de su Plan Divino y de sus herramientas personales para llevarlo a cabo con alegría, día a día. La cita tiene que ser cotidiana para que no estén influenciados por su propia imagen y para que las situaciones del día no los aparten de su recorrido real. Una cita diaria los mantiene relacionado con lo que los ayudará a amarse y a realizarse.
La intimidad con uno mismo, en la sensación de sí mismo, es lo más importante en un recorrido de evolución espiritual y energética.
Hace posible un verdadero autorreconocimiento, a partir del cual la unión con los demás adquiere todo sentido.
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