LA PRUEBA DE MARÍA
1- El Señor Maitreya proyectó en la mente de María una pequeña imagen del Dios Sol Helios, como del tamaño de un dedo.
Entonces, fue severamente probada en la Concentración. Se le requería que sostuviera ese Concepto Inmaculado, manteniendo esa imagen en su mente contra todo tipo de intrusión, tanto interna como la que otros seres le enviarían. Había tormentas, vientos, lluvias y granizos mentales generados por la conciencia del Señor Maitreya e incitados a luchar con Ella en un esfuerzo por desviar Su atención y desintegrar el pensamiento-forma de esa imagen.
El Elohim Hércules y otros Seres Divinos también la pusieron a prueba. Mantenerlo le demandaba tosa Su fuerza, Poder de Concentración y una intensa Oración. Le dirigían tanto las buenas ideas y cosas que Ella más amaba, como así también fuerzas desintegradoras y presiones para intentar distraer su atención. Los vientos soplaban alrededor de Ella y de la Imagen que sostenía, intentando de cualquier forma retirarle el sostenimiento de ese Concepto.
2- María era capaz de mantener Concentrado Su pensamiento y sostener la Imagen, la Forma Inmaculada en Su mente, y alimentarla con sus sentimientos. Esta prueba duró tres horas. Después, el Señor Maitreya le dijo que ya era suficiente. Ella merecía la oportunidad de convertirse en la Madre de Aquel que iba a dar a Luz, de ser Guardiana y Protectora de Jesús. En esta Iniciación, María tuvo que probar al Señor Maitreya y al Tribunal Kármico que era capaz de retener la Imagen Concentrada del Ser Divino sin importar qué presión de energía hacia Ella, desde lo interno o desde afuera. Hasta las hermosas Actividades de la Luz eran utilizadas, sutilmente, para tratar de hacerla abandonar esa Imagen Perfecta de Su mente, en ese instante, la forma hubiera sido destrozada y liberada y María hubiera perdido la oportunidad de convertirse en la Madre del Mesías.
3- Previo a esta Iniciación, María había sido preparada a lo largo de muchos siglos, tanto en los niveles Internos como en sus encarnaciones, para mantener el "Divino Concepto Inmaculado" que después, tan fielmente, sostuvo para Jesús durante toda su corriente de vida. También estudió en los Templos con los Arcángeles Rafael y Gabriel. Entre encarnaciones, María había enseñado a los Seres Elementales a concentrarse para mantener el patrón de cualquier cosa que iban a traer a la manifestación, ya fuera un arbusto, un árbol, una flor o cualquier clase de vegetación.
4- Mientras María permanecía de rodillas ante el Señor Maitreya, Éste le colocó Sus manos en la cabeza bendiciéndola y le dijo que lo había hecho bien, pero le advirtió que las presiones que Ella había sentido en esta prueba, mientras estaba en Sus Cuerpos Superiores, eran menores en comparación con la oposición que encontraría en la verdadera vida física. El odio, los celos, el egoísmo y otros vicios que sería dirigidos hacia Ella, su esposo y Jesús, serían mucho más grandes y fuertes. A Ella se le requería que sostuviera esta Imagen o Concepto durante toda la encarnación de Jesús. Su particular entrenamiento por muchos años había sido a lo largo de estos lineamientos. La Misión de María era la de mantener el "Concepto Inmaculado" para Jesús, no sólo durante Su gestación e infancia, sino también a través de su vida en la Tierra y especialmente durante el momento de su Ministerio.
5- Cuando a María se le dio la oportunidad de tener la responsabilidad de ser la Madre del Amado Jesús, solicitó un gran favor: Pidió que después de encarnar y cuando llegara el momento de empezar Su Misión, se le permitiera al Arcángel Gabriel traer el recuerdo de Su Misión a la conciencia externa. También le pidió que cuando llegara el período de los nueve meses de gestación, el Arcángel Gabriel le trajera la remembranza de Su Maestro Maitreya para que Ella pudiera reproducir Su Imagen en la total estatura, belleza y Perfección del Cuerpo Electrónico de Jesús, dando a Luz una forma física parecida a la de Su Maestro. El permiso le fue garantizado y el Arcángel Gabriel hizo los Votos para que así sucediera.
Extraído del libro: "La Dispensación Cristiana"
Por A.D.K. Luk
Editorial Plateada.
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